La implementación y la finalización con éxito de una campaña de marketing móvil es posible sólo cuando la estrategia es a toda prueba. El público objetivo debe ser identificado en el primer lugar. De nada sirve el envío de mensajes irrelevantes a un cliente. Por ejemplo, si una empresa de venta de cosméticos sigue enviando mensajes a un cliente masculino, el resultado tiene que ser negativo. Si se aplica el mismo criterio en el caso de una clienta, los resultados tienen que ser positivo.
Así que es mejor discutir con las agencias de publicidad y luego fijar los planes de una campaña de marketing móvil.