Mi disfrute del bien jardinería proviene no sólo de la gardenbut acabada de las interminables horas que me paso el diseño y planificación del jardín real, desde el primer momento en que tengo el germen de una idea, hasta el momento pongo el último retoño, y la planta de última flor. Todo lo que quiero, todo lo que puedo ser, debe mostrar a través de la primera vez que una persona entra en esta tierra de fina jardinería, un lugar de paz y tranquilidad, donde una persona puede meditar en las cosas buenas de la vida.
Por lo tanto, una fuente de agua, idealmente uno que hará un gorgoteo calmante de forma continua, con una pequeña de tipo paso a paso de la cascada-cum-estanque, situado en preciosas losas de piedra plana con un toque de musgo que crece en ella. Un lirio de agua buena o de loto para emiten un color de contraste, y tal vez un pez o dos. Unos helechos y plantas de tipo selva tropical de hoja colocados alrededor de la laguna, y he terminado con esta etapa de mi bien jardinería.
Lo ideal sería que me encantaría un gran árbol de pie en un rincón del jardín, con una aterciopelada delicioso tronco marrón oscuro que puedo casi palmo con mis brazos, rebosante de vibrantes hojas verdes que se derraman sobre el suelo sin hacer caso abandonar. Ya que no siempre podría conseguir lo que quiero, me conformo lugar por unos árboles jóvenes que algún día cumplir mi deseo. Desde el verde es mi objetivo por el momento, que vería también de que pone un césped con sombra preciosa que puede hundir sus pies desnudos en la hora de tomar un giro sobre su jardín.
Me encanta la idea de un jardín Zen, pero prefiero los colores y un montón de plantas, así que me gustaría incorporar esta característica en mis esfuerzos de jardinería finas mediante la colocación de un camino, hecha naturalmente de piedra labrada en bruto, zigzagueando en un pausado curso a través del jardín.
Y para terminar por si fuera yo tendría una pequeña alcoba, no visto desde lejos, que dio el curioso visitante una visión de ángulo ancho de todo el jardín, con una sombra de sol, y un banc