No hay nada como la emoción que sientes cuando empiece a hacer dinero en línea. Desde que tuve mi primer ordenador que había soñado con ser dueño de un sitio web que ganar dinero para mí. Mi motivación siempre ha sido simple. Quiero la libertad de vivir la vida por mi cuenta terms.To ser capaz de hacer lo que quiero cuando me da la gana. Quiero sentir la seguridad de tener un ingreso regular. Y, finalmente, quiero que el poder adquisitivo para poder comprar lo que quiero y donde quiero ir. No es mucho pedir.
Ahora sé que me fui por la ruta larga, cuando me puse a aprender cómo hacer dinero en línea. Perdí una cantidad enromous de tiempo, energía y dinero en el aprendizaje de cosas que no necesitan saber y hacer las cosas que son una completa pérdida de tiempo. Lo más molesto de todo era que los saber-él-alls que están cosechando los sorprendentes recompensas de su éxito son tan pobres en mostrar a otros cómo lo hacen. Sin embargo, son muy buenos en el cobro de una gran cantidad para su información y luego por lo que es difícil de entender lo que significan.
Así que me hice a la idea desde el principio que nunca iba a cobrar por cualquier información que me pase a otras personas acerca de cómo hacer dinero en línea. Estas son las lecciones que he aprendido. Considero que ellos son los verdaderos secretos de hacer dinero en línea. En primer lugar, comenzar con un nicho de mercado. Sé que esto es diferente de cómo la gente hace cosas en el mundo real, pero en el ciberespacio este es el mejor lugar para empezar. La forma más fácil es escoger a un grupo de personas como usted. Las personas con las que comparten un problema.
En segundo lugar, encontrar un producto que solucione su problema. Hay millones de ellos por ahí. Muestro mis alumnos cómo encontrarlos en mi diplomado gratuita. En tercer lugar, construir una, una página web muy simple. Su sitio sólo tiene que ofrecer un producto que resuelve un problema para las personas con el problema. En cuarto lugar, dirigir el tráfico a ese sitio web.
Imagina mi emoción cuando, por la simple aplicación de esta fórmula, empecé a recibir correos electrónicos diciendo: "Felicidades, usted acaba de hacer una venta!" La emoción creció cuando fui a mi cuenta bancaria en línea y vi que el dinero que se sienta allí, justo debajo de mi nombre. Y la emoción llegó a su punto culminante cuando los e-mails de los "ENHORABUENA" empezaron a llegar en números cada vez mayores. Mi consejo es simple; no espere, utilice la fórmula