Por último, los defensores de las prácticas de toma de decisiones socialmente responsables argumentan que este tipo de tácticas pueden prevenir el aumento de la intervención del gobierno, lo que obligaría a las empresas a hacer lo que ellos no lo hacen voluntariamente. Todos estos argumentos se basan en la suposición de que una empresa tiene la responsabilidad no sólo a los accionistas sino también a los clientes, empleados, proveedores y las public.
Opponents generales del modelo socioeconómico argumentan que una empresa debe hacer lo que mejor sabe hacer; obtener un beneficio por fabricar y comercializar productos que la gente quiere. Los que apoyan su posición argumentan que los gerentes de empresas son los principales responsables a los accionistas, por lo que la gestión debe ser refiere a proporcionar un retorno de la inversión de los propietarios. Además, el tiempo de las empresas, el dinero y el talento se deben utilizar para maximizar los beneficios, no para resolver problemas de la sociedad.
Además, los problemas sociales afectan a la sociedad en general, por lo que las empresas individuales no se debe esperar que estos problemas suela. Además, los problemas sociales son responsabilidad de los funcionarios del gobierno que son elegidos para tal fin y que son responsables ante los electores de su decisión. Estos argumentos se basan, obviamente, en el supuesto de que el objetivo primordial de la empresa es obtener beneficios, mientras que las instituciones gubernamentales y sociales deben hacer frente a los problemas sociales.