La tecnología puede y finalmente convertir la industria del automóvil al revés. Es una progresión tan esperado que comenzó hace años. Los concesionarios de automóviles se van a ver muy diferente en los próximos 5 a 10 años, y creo que es un cambio que todos hemos esperado. Quién sabe tal vez usted va a comprar su próximo coche en Walmart? O tal vez Fed Ex será entrega a su casa?
El otro día fui más allá de un lote de autos, y este extraño pensamiento se me ocurrió, "¿por qué tenemos vendedor de coches más?" Ahora bien, no quiero sonar frío, pero creo que el negocio de las ventas de automóviles ha evolucionado lo suficiente como para decir que ahora podemos eliminar al intermediario.
El viejo sistema de precio de negociación se sustituye con los consumidores hacer la tarea en el Internet. Incluso con los coches usados de la historia es la misma, la investigación por parte del consumidor. El financiamiento también se ha sacado del anillo de negociación, como la mayoría de la gente ya sabe su calificación crediticia y se han investigado a la empresa que el distribuidor utiliza para los préstamos.
Porque los coches están informatizadas ahora, usted tiene una reducción del 80% en el público en general que entra a su departamento de partes en busca de solucionar sus propios automóviles. Algunos de los más grandes robots y dispositivos de ahorro de mano de obra ya están en nuestras fábricas.
Además, no importa cuán grande la barra de revistas, café y jugo está en el concesionario, ellos también algún día será obsoleta.
Hace años, cuando un concesionario de automóviles no tenía el coche que quería en el lote, que era como un acto del Congreso para que "enganchar para arriba" con este coche de sus deseos. Tendría que presentarse a usted como en el saber, un motor real y un agitador para hacer el trabajo. Y a su vez, que siempre utilizamos este mismo concesionario porque, bueno, crecieron en nosotros, una especie de la misma manera de la señora de barrio gato.
Pero en estos días, sólo pueden apuntar y hacer clic de un automóvil en la línea y sólo Dios sabe dónde está mi coche está viniendo; pero puedo recogerlo en un día más o menos, de un distribuidor que va a tratar de venderme todo tipo de cosas que no necesito.
Mirando hacia atrás en todas mis experiencias de concesionarios de automóviles, de veras que parece que ha sido un deporte de competición real, no entre los concesionarios, pero entre el distribuidor, el vendedor, y