o, se establece un escenario desconcertante para los estudiantes y padres por igual en los próximos años. ¿Cuál es la respuesta? Una sugerencia es crear un organismo nacional de acreditación en el Departamento de Educación de Estados Unidos que vincula a todas las escuelas a las normas mínimas, ya sean grandes o pequeños. Esto acabaría con todos los organismos privados y convertir el proceso de acreditación al Gobierno Federal, no muy diferente a la de la mayoría de las otras naciones del mundo.
Dicha agencia súper aseguraría créditos universitarios son intercambiables y fácilmente transferible para que los estudiantes que solicitan títulos avanzados suele ser rechazados por ser quien acreditado sus escuelas y cursos. El campo de juego se volvería más nivel. Hasta entonces, es la percepción y el mito que cuenta, no la realidad.