¿Es entonces una madre, porque sus períodos mensuales regresan después de su entrega, a renunciar a la enfermería? Desde luego que no, a menos que la salud del niño se ve seriamente afectada por la misma; pues por lo general se encuentra que, como los períodos vienen todo el año, manteniendo el niño más o menos desde el pecho, durante su permanencia, y la alimentación de él en el alimento artificial, va a prevenir el trastorno de la salud del niño, y poder en los intervalos a amamantar a su bebé con ventaja.
Hay que añadir, sin embargo, que una nodriza es que recurrir a más que cualquier riesgo que se corre de dañar la salud del niño; y que, en todo caso, será necesario alimentación parcial en un período mucho más temprano que cuando una madre no es así afectada. La leche también puede volverse menos nutritiva, y disminuyó en cantidad, por la madre de nuevo quedar embarazada. En este caso, sin embargo, la salud de los padres será principalmente sufrir, si perseveran en enfermería; esto, sin embargo, de nuevo actuará perjudicialmente al niño.
Será prudente, por lo tanto, si se produce el embarazo, y la leche en desacuerdo con el niño, a renunciar a los deberes de una enfermera, y para poner al niño en una dieta artificial adecuada. El bebé que está constantemente en el pecho será siempre el sufrimiento, más o menos, de flatulencia, quejarse, flojedad de los intestinos, y vómitos. Esto es causado por un intervalo suficiente para no ser permitido entre las comidas para la digestión. La leche, por lo tanto, pasa desde el estómago hasta los intestinos sin digerir, y los efectos simplemente alude a seguir.
El tiempo no sólo se debe dar para la correcta digestión de la leche, pero el propio estómago se debe permitir un tiempo de reposo. Este mal, entonces, se debe evitar con sumo cuidado por la madre adherirse estrictamente a esas normas para la enfermería. Las entrañas de la bebé en el pecho, así como después de su destete, generalmente se ven afectados por la dentición. Y es una suerte que este es el caso, ya que previene las afecciones más graves. De hecho, la diarrea que