s. Al planear una boda en la playa, es aconsejable ser flexible para cualquier eventualidad que pueda surgir. Esto incluye tener un plan de copia de seguridad por si acaso la madre naturaleza decide tirar en una sorpresa que amortiguar sus espíritus elevados. Trabajar con gente bien informada es una ventaja, así como aquellos que han tenido una boda en la playa. Los clientes son importantes y hay que asegurarse de que saben donde la boda se lleva a cabo y confirme con todos los proveedores de servicios antes de firmar ese proyecto de ley.