También pensaban que podían hacer y hacer más trabajo para la cita original que les di. E imagina mi sorpresa cuando empezaron a decirme lo que iba a limpiar en su próxima cita! Yo siempre había tratado a la gente de limpieza para mí con respeto profesional. Así que me tomó un tiempo y unos pocos clientes para averiguar lo que estaba pasando y por qué. Obviamente, otros limpiadores que trabajan solos caerían en esta trampa y el cliente tiene su camino. Salí de mi estupor sorprendido obvio, cavé en mis talones y funcioné mi negocio como lo había planeado.
Aprendí que cuando calculé un trabajo, el cliente tenía que decidir si querían lo que mi negocio que ofrece y también tuve que decidir si quería limpiar para esta perspectiva. He utilizado formularios comerciales profesionales, de encargo que diseñé y siempre requieren nuevos clientes a firmar un acuerdo de servicio. Fue a mí decidir si quería doblar la regla, no hasta el cliente para exigir que doblarla. ¿Y sabes lo que pasó? Mi negocio fue creciendo, las referencias seguía llegando y este pequeño secreto sucio ya no me afectó.
Sinceramente, creo que cada limpiador de la casa puede ganar un ingreso de tiempo completo y disfrutar de su negocio de limpieza de la casa por saber qué esperar antes de entrar en un negocio que no pueden ser totalmente preparados.