¿Qué otra cosa para hacer de los comentarios del lunes por la secretaria de Estado, Hillary Clinton, amenazando con incluir el grupo en la próxima ronda de sanciones económicas destinadas a obligar a Irán a abandonar su programa de armas nucleares. Hablando en Qatar en su camino a Riad, la capital saudí, Clinton dijo que Estados Unidos no "permanecer de brazos cruzados", mientras que Irán persigue armas nucleares, según un importante servicio de noticias internacionales.
"Estamos planeando para tratar de llevar a la comunidad mundial juntos en aplicar presión a Irán a través de sanciones adoptadas por las Naciones Unidas que se dirige especialmente a aquellas empresas controladas por la Guardia Revolucionaria, que creemos que es, en efecto, suplantando al gobierno de Irán ", dijo Clinton. El grupo de la Guardia Revolucionaria, que se creó después de la revolución de 1979 para proteger a los gobernantes del país, cuenta con 125.000 soldados e incluye divisiones del ejército, la marina y del aire, dijo a Reuters. El grupo está separado del ejército de 350.
000 soldados de Irán y está bajo el mando de la máxima autoridad religiosa del país, el ayatolá Ali Jamenei. El grupo ha ampliado constantemente su alcance y ahora está involucrado en proyectos de construcción, comercio internacional y desarrollo de petróleo y gas. Clinton dijo que Estados Unidos cree que el grupo de Guardianes de la Revolución era insoportable gobierno civil de Irán y con el objetivo de establecer una dictadura militar.
"Vemos que el gobierno de Irán, el líder supremo, el presidente, el parlamento, está siendo suplantado y que Irán se está moviendo hacia una dictadura militar", dijo. "Ese es nuestro punto de vista." Clinton también hizo un punto de afirmar que los Estados Unidos no estaba pensando en la guerra con Irán.
"Estamos planeando para tratar de llevar a la comunidad mundial juntos en aplicar presión a Irán a través de sanciones adoptadas por las Naciones Unidas que se dirige especialmente a aquellas empresa