s y los diferentes momentos del día. Al amanecer, el mármol tiene una delicada flor en la cáscara de color rosa, para el mediodía que brilla majestuosamente blanco, convirtiendo a un gris perlado suave al atardecer. En luna llena como visitante contra el cielo estrellado. Monzón nubes le dan un tinte azul de mal humor y que aparece y desaparece como un espejismo en la noche a la deriva de invierno.
Puede ser sólido y terrenal, frágil y etérea, blanco, ámbar, gris y oro. Las muchas caras de Taj Mahal muestran el poder de seducción de la arquitectura en su mejor momento.