cara tan surrealista ser a cara con estos depredadores, pero al parecer estadísticamente hay más posibilidades de morir a manos de un coco que cae sobre la cabeza de ser atacado por un tiburón. Aún no te gusta mis posibilidades fuera de la mente jaula. Después de 45 minutos se nos ocurrió para que el otro grupo entra, y estábamos a tope. Es una experiencia de toda una vida y me siento increíblemente afortunado de haber tenido la oportunidad de hacerlo.
Cuando regresamos a tierra firme nos fuimos a cenar en el restaurante del hotel de nuevo, y ninguno de nosotros podíamos dejar de hablar de ella, pero se balanceaban para el resto de la noche desde el barco !!