Yo creo firmemente que el honor es importante en nuestra vida cotidiana. No sólo nuestras las privadas, pero en nuestro negocio y en la vida pública también. Creo que tenemos que encontrar nuestra conciencia nacional, una vez más y que sea sensible una vez más para hacer el mal. Creo que a la gente hay que esperar más de nuestros líderes y de nosotros mismos cuando se trata de honrar.
Tenemos que estar indignados cuando oímos hablar de delito sin importar el nivel o que lo está haciendo. Tenemos que practicar todos los días en nuestra propia vida a toda costa. Honor no debe ser la norma en la excepción.
Podemos comenzar con las pequeñas cosas. La honestidad es una gran parte de honor. Podemos, como individuos, empezar por practicar la honestidad completa y esperando que nos rodean a hacer lo mismo. Usted ve que no es suficiente para ser honesto, también tenemos que esperar honestidad a cambio. Necesitamos mutuamente responsables.
De esta manera todos los barcos suben a medida que una vez más reclamamos el honor de nuestro país. Una vez que domines la honestidad movimiento a un trato justo, el juego limpio, y mirando hacia fuera para el resto de compañeros.
Te reto (como yo mismo) para ser una persona de honor. También te reto y yo para hacer negocios con gente de honor. Desde allí se puede llegar a el resto de este gran país y esperar que el honor de nuestros líderes. Todo comienza con nosotros el individuo. Tenemos el poder de traer el honor una vez más a nuestro país.
Podemos enseñar a nuestros hijos, podemos enseñar en nuestras escuelas. Esto no es una cuestión religiosa se trata de un tema de interés nacional, porque sin ella no podremos. Fracasaremos en nuestros barrios, nuestras comunidades, nuestros pueblos, nuestras ciudades, y, finalmente, en el mundo. Vamos a conseguir ese péndulo oscilando y vamos a recuperar nuestro lugar de honor.