e el médico a cargo sabe de alguna signos que indican que hay un problema que tiene lugar. Ya sea debido a la falta de formación, la inexperiencia, el exceso de trabajo, o fallas en la comunicación, un fallo en cualquiera (o como en este caso todas) de estas áreas puede conducir a lesiones devastadoras para el niño. Cuando esto sucede, la familia (tanto en su propio nombre y en nombre del bebé) puede ser capaz de presentar una demanda por negligencia.
Como esta demanda pone de manifiesto, además, dichas demandas, debido a la naturaleza y el alcance de la lesión para el bebé, puede conducir a una recuperación sustancial.