los acreedores para su votación y si el caso es proceder hacia adelante, el deudor debe recibir por lo menos un voto de los acreedores. Los restantes acreedores que se oponen al plan pueden ser obligados a aceptar el plan por el tribunal que se denomina cram down. La ventaja del capítulo 11 de bancarrota es que el deudor tiene control sobre el contenido del plan y podrá proponer términos que son a su beneficio.
Sin embargo, la ventaja del capítulo 13 de bancarrota es que usted no necesita para solicitar los votos de los acreedores, sino que está sometido a un plan de tres o cinco años sobre la base de sus ingresos. Como se puede ver, se trata de una compleja estrategia para elegir el mejor capítulo de quiebra basado en un individuo circunstancias.