Durante la campaña del presidente Obama, cuando fue todo el país ensalzando las virtudes de la reforma de salud, un fontanero se puso de pie y declaró que él no podía hacer negocios si se vieron obligados a comprar uno de los seguros de salud empaquetado para las pequeñas empresas entonces disponibles.
El fontanero, que en realidad era un fontanero sin licencia (en mi estado, si usted no está licenciado, usted no es un fontanero), dijo que había obtenido financiación para iniciar su propio negocio de plomería, pero si se le requiere para comprar un seguro de salud por sus empleados, que no podía permitirse el lujo de entrar en el negocio después de todo.
Los republicanos se aferró a la historia de este personaje para argumentar en contra de las propuestas de Obama para la cobertura de salud universal, pero el argumento se fue a ninguna parte, Obama ganó, y para 2010, se firmó un proyecto de ley de reforma de salud. Al final resultó que, a menos que Joe el fontanero intención de tener 50 empleados o más, él no tendría que proporcionar seguro médico a sus empleados. Joe el fontanero no estaba tratando de negar la responsabilidad de las empresas para suministrar los planes de seguro de salud a los empleados.
Ha sido una práctica aceptable durante décadas y abrazado por los conservadores y liberales por igual. Propio negocio ha cumplido con su responsabilidad con la exuberancia y la dignidad de todas estas décadas, tomando ganancias menores con el fin de hacerlo. Actualmente, el 98 por ciento de las empresas con 200 o más empleados ofrecen planes de seguro de salud para sus empleados. Cerca de 150 millones de estadounidenses están empleador asegurado, y se espera que ese número aumente a 159 millones en 2019.
La nueva Ley de Reforma de la Salud sigue dependiendo de negocio para proporcionar los estadounidenses a trabajar con el seguro de salud que necesitan. El seguro de salud para las pequeñas empresas no es tan barato como el seguro de salud para las empresas con 200 o más empleados. Esto se debe a que las aseguradoras ofrecen descuentos en función del número de personas a ser asegurados. Naturalmente, una organización más grande será capaz de obtener los descuentos fuertes mientras que las empresas más pequeñas no pueden.
Esto le da algo de una ventaja competitiva a mayor negocio: porque pueden ofrecer posibles empleados seguro médico como un beneficio y las pequeñas empresas no pueden, el mejor talento va a los chicos más grandes. La pequeña empresa,