En septiembre 1912 parecía ceder ante el ejército federal, que luchó, a causa de la multa diplomática Felipe Angeles, que sin embargo no pudo. Mientras tanto, el presidente Madero tenía ya dado su respaldo a la iniciativa del diputado Luis Cabrera de promulgar una ley de reforma agraria. El gobernador de Morelos Porfirio Leyva dijo en diciembre de ese año su simpatía hacia el proyecto. En febrero de 1913, sin embargo, Victoriano Huerta mandó asesinar al presidente Madero, el poder usurpado, y el siguiente 30 de mayo de Zapata declaró indigno de estar en la silla.
Varios meses después, en enero de 1914, estableció formalmente el Ejército de Liberación de América Central y del Sur en abril y controlado los estados de Morelos y Guerrero. Terreno Ley Huerta derrotó a los poderosos soldados Carrancas bloquearon el paso de los zapatistas a la Ciudad de México cuando ya estaban en avanzado el sur de Milpa Alta. Pero eso no molestó a Zapata como el hecho de que el Primer Jefe Venustiano Carranza declaró el 05 de septiembre 1914 que no iba a aceptar las reclamaciones de tierras de los zapatistas. Dijo por qué.
Las propuestas de Zapata se redujo a una región y el Sur-Carranza querían ampliar en todo el país. El plan inicial estaba contenido en un revolucionario y que quería convertirse en ley. Los argumentos eran razonables, pero asumieron que Zapata fue otra táctica para detener no sólo a él sino también a la reforma agraria. Sin esperar más instrucciones emitidas a sus tropas para volver y proceder a distribuir la tierra en cualquier territorio bajo su jurisdicción. La reforma agraria no comienza con palabras, sino con hechos y se mantendría con los brazos, no con la ley.
Al mismo tiempo, se puso en contacto con Francisco Villa en una Convención Revolucionaria era consciente de que el gobierno de facto de Venustiano Carranza. La Convención se llevará a cabo en Aguascalientes, bajo