A menudo se llama el "asesino silencioso" porque puede dañar el corazón, los riñones y el cerebro, aun si se siente ningún síntoma. La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre circulante en las paredes de los vasos sanguíneos, y constituye uno de los signos vitales principales. Si su presión arterial es normal, se puede trabajar con su equipo de atención médica para que siga siendo así. Si su presión arterial es demasiado alta, necesita tratamiento para prevenir daños en los órganos de su cuerpo.
La presión arterial alta es peligrosa porque hace que el corazón trabaje demasiado duro y contribuye a la aterosclerosis (endurecimiento de las arterias). La presión arterial es una medida de la fuerza que la sangre empuja contra las paredes de las arterias a medida que avanza a través de su cuerpo. Los médicos no saben qué causa la presión arterial alta de 90 a 95 por ciento de las personas que la padecen.
En aproximadamente el 10 por ciento de los pacientes, la enfermedad puede atribuirse a causas específicas: la herencia, alteraciones renales, tumores de la glándula suprarrenal, diabetes, enfermedad renal crónica, alteraciones hormonales, el uso de píldoras anticonceptivas, el embarazo o un estrechamiento congénito de la aorta. Otras posibles causas de presión arterial más alta son el aumento de peso y la disminución de la actividad física en invierno.
La nicotina de los cigarrillos y otros productos del tabaco hace que sus vasos sanguíneos se constriñan y que su corazón lata más rápido, lo que aumenta temporalmente la presión arterial. En algunas personas, el alcohol hace que la presión arterial aumentando mucho. La clave para cualquier tratamiento de la presión arterial alta es traer la enfermedad bajo control adecuado. El tratamiento depende de qué tan alto que su presión arterial es, si usted tiene otros problemas de salud como la diabetes, y si cualquiera de los órganos que ya han sido dañados.
El tratamiento comienza con cambios que puede hacer a su estilo de vida para ayudar a reducir su presión arterial y reducir el riesgo de enfermedades del corazón. Usted quiere lograr su objetivo de tratamiento, pero a veces parece que su presión arterial simplemente no quiere ceder. Usted y su médico pueden revisar cuidadosamente su tratamiento y estilo de vida para ver lo que está pasando.
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