El tratamiento para el síndrome disfórico premenstrual varía ampliamente. Un tratamiento popular es ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina) también conocida como antidepresivos. La serotonina es una hormona, producida por una glándula en el cerebro, relacionado con la regulación del humor. La investigación ha demostrado que los antidepresivos como el Prozac o Paxil, pueden disminuir significativamente los síntomas.
En muchos casos, el medicamento sólo se toma en el inicio de los síntomas y continuó durante seis o siete días. También se puede recetar junto con anticonceptivos orales. Los defensores de las teorías de la dieta y la deficiencia de vitamina recomiendan disminuir la cafeína, azúcar y sodio y reducir el consumo de alcohol. También se recomiendan dosis diarias de vitamina B6 y E, y calcio. Algunas investigaciones indican que la terapia de luz puede ayudar a aliviar los síntomas del síndrome disfórico premenstrual.
La terapia de luz o fototerapia es la exposición a la luz del día, o para determinadas longitudes de onda de luz que utilizan láseres, diodos emisores de luz, lámparas fluorescentes o muy brillante luz de espectro completo para una cantidad prescrita de tiempo cada día. La terapia cognitivo conductual (TCC) se ha utilizado con gran éxito, pero, como en todos los tipos de psicoterapia, se requiere un compromiso por parte del paciente /cliente, con el terapeuta, para influir en el cambio.
Si usted está sufriendo de síndrome disfórico premenstrual, usted no está solo.
Se estima que una de cada 20 mujeres que tienen un ciclo menstrual regular también tienen TDPM. La investigación está en curso para encontrar un tratamiento definitivo, pero mientras tanto aquí está lo que puede hacer: