Los océanos proporcionan gran parte de la oferta mundial de alimentos.
Estos datos tomados junto con el efecto de calentamiento de los océanos de la Tierra como resultado del aumento de dióxido de carbono en la atmósfera de la Tierra y su efecto resultante en los patrones climáticos, pinta un cuadro alarmante en cuanto a la evolución del entorno natural y el futuro de la humanidad.