Aparte del hecho de que la mayor parte de la información que flota alrededor es evidentemente falso o exagerado mucho, si usted elige para pasar el chisme junto se corre el riesgo muy real de ser confrontado por el preso en cuestión o de encontrarse en medio de una piscina climatizada argumento. Evite la molestia y mantenerse alejado de chismes y rumores. Además, debido a la falta total de privacidad, que constantemente oír las conversaciones de los demás reclusos. No haga un intento activo para escuchar. No responda a lo que se dice.
Si usted no puede dejar de escuchar, asegúrese de que no es obvio que lo están haciendo. En esta misma línea, tener cuidado con hacer demasiadas preguntas sobre la situación personal o jurídica de otros presos federales de la prisión ya que estará sospechoso de ser una rata. Como mi celly le gustaba decir, "Cuanto más se sabe, más se puede decir". La única pregunta que está bien pedir es, "¿cuánto tiempo tienes?" Se le pedirá esto constantemente, sobre todo cuando llegas por primera vez. También te darás cuenta de que nadie le preguntará acerca de sus cargos.
Puede parecer que la pregunta más razonable del mundo considerando dónde se encuentra, pero es un pecado capital. Usted encontrará que con el tiempo como se llega a conocer a los otros reclusos, muchos compartirán sus historias con usted. Esto esta bien. Pero nunca se lo preguntas. Por último, cuando usted está caminando alrededor de la unidad, absolutamente no mirar a los cubos o células de otros reclusos. Se le sospecha de ser un ladrón o un pervertido y es probable que se enfrentan rápidamente. 3.
Nunca acercas demasiado ComfortableBelieve o no (y es probable que sea difícil de creer sus primeras semanas), con el tiempo se llega a conocer una serie de otros reclusos, que va a caer en una rutina regular y usted se acostumbrará a su casa nueva. La vida en prisión comienza a parecer bastante normal. Esto es bueno. Pero no se deje conseguir demasiado cómodo. Con esto quiero decir, no bajar la guardia. Recuerde siempre dónde se encuentra. No diga demasiado. No pida demasiado. No llame la atención indebida a ti mismo.
En muchos sentidos, la prisión federal refleja la so