Algunos de los niños no son realmente alérgicas a la comida y muestran reacción única leve. Al igual que las personas que son intolerantes a la lactosa sufren de diarrea y dolor de estómago después de consumir leche y productos lácteos. Esto no es una indicación de que el niño es alérgico a la leche. Esta reacción sucede porque su cuerpo es incapaz de descomponer los azúcares que se encuentran en los productos lácteos y leche. Si las condiciones son graves, un médico debe ser consultado inmediatamente.
Si se diagnostica la alergia a los alimentos, el médico hace referencia a un especialista en alergias. El médico hace preguntas como patrones de alimentación, reacciones alérgicas anteriores y el período de tiempo entre el consumo de alimentos y el surgimiento de los síntomas. El especialista también puede preguntar acerca de condiciones alérgicas como el asma relacionada o el eccema y si las reacciones alérgicas son hereditarios.
Por lo general, la prueba cutánea y prueba de sangre se hace para probar los anticuerpos y la reacción que tienen en la piel cuando se expone a la sustancia alérgica. Los niños que son alérgicos a huevo y la leche que superan la edad avanza. Pero las alergias que son graves y están relacionados con elementos tales como maní, camarones, y una especie de peces, duran para toda la vida. Aparte de la comida, los niños pueden ser alérgicas a ciertos medicamentos y el polen de la flor. La mejor manera de evitar las alergias es evitar la causa de ello.
Ningún medicamento específico se ha desarrollado para la cura de alergias.