En la actualidad, la ciencia médica es incapaz de sustituir a los fármacos anti-inflamatorios no esteroideos con otros medicamentos más seguros. Aunque los fármacos anti-inflamatorios no esteroideos tienen muchos efectos secundarios, que son también la opción primaria en el tratamiento de la artritis reumatoide y otras enfermedades inflamatorias. Con el fin de prevenir la aparición de úlceras en pacientes que reciben este tipo de tratamientos de medicación, esta categoría de personas se beneficiará de los exámenes médicos frecuentes.