Los adolescentes son más propensos a trastornos de la alimentación que cualquier otro grupo de edad. Casi todos los casos son hembras con machos de menos de 10%. Según algunos estudios, el 5-7% de las mujeres en los EE.UU. sufrirá de un trastorno de la alimentación en algún momento de sus vidas
Los niños crecen en una sociedad donde los medios de comunicación está constantemente enfocado en ser delgado. Los medios de comunicación pone mensajes en la cabeza todos los días sobre nuestros cuerpos en busca de cierta manera.
La mayoría de las personas con trastornos alimenticios piensan que es normal y no se dan cuenta que tienen un problema. Esto se debe a que no saben mucho acerca de los trastornos alimentarios. Ellos no pueden verse a sí mismos la forma en que el resto del mundo lo hace. Si un niño ve que sus padres van a dieta y se obsesionan por su peso, las posibilidades de que haciendo lo mismo son muy buenos.
Las personas con trastornos de la alimentación tienden a ser reservado. Ellos pueden parecer retirado o deprimido. Por lo general, comienzan haciendo comentarios sobre su gordura.
Con el tiempo, van a empezar a recoger a su comida. Es muy difícil para las personas a admitir que tienen un trastorno alimentario.
Los trastornos alimenticios son enfermedades que pueden ir desde morirse de hambre a comer en exceso. La anorexia y la bulimia son un par de ellos. Estas enfermedades no son realmente acerca de la comida, pero son mucho más profundas. Por lo general se acompañan de otro trastorno mental como el abuso de sustancias, depresión, ansiedad o trastornos de pánico. La víctima puede ser desesperadamente buscando la aprobación o aceptación.
Las niñas tienden a sentirse deseado si son delgadas. Hay muchos factores que pueden allanar el camino a los trastornos de la alimentación muy peligrosas.
Si usted está en silencio sufriendo de un desorden alimenticio, usted debe saber que es física y emocionalmente destructiva. Pero también debe saber que usted puede recuperarse completamente de esta enfermedad si haces algo al respecto. Busque ayuda antes de que sea demasiado serio y amenazante con el tiempo la vida.
Orientación psicológica y psicoterapia abordarán tanto el trastorno de la alimentación y de las fuerzas que contribuyen a ella. No se avergüence de hablar con alguien sobre lo que sientes y lo que está pasando. Usted no está solo.