Para ello, es preferible que otra persona que lo acompañaba en la habitación y utilizar palabras tranquilizadoras, sin recurrir a expresiones drásticas o queja, como "ya es suficiente", "Al igual que todos los días," y así sucesivamente. Si se logra este objetivo, es normal que al día siguiente no recuerda nada, tan poco dinero en efectivo va a insistir en lo que pasó. Esto es muy importante durante la infancia, un período durante el cual estos casos deben ser tratados con la máxima delicadeza, sin recriminaciones ni intenta convencer de que esto no vuelva a suceder.
Sin embargo, con el fin de evitar cualquier accidente, las ventanas de la casa deben estar cerradas durante las horas de sueño y monitoreados aquellos objetos que pueden causar daño físico. Otra práctica habitual, especialmente los niños, continúan pasar por buenos hábitos y regular de horario de sueño estable. Horas dormir lo suficiente (alrededor de ocho) con alteraciones mínimas facilita el resto de los más pequeños, y reduce la probabilidad de desarrollar más episodios.