Xanax es un medicamento que se sabe que es muy eficaz para calmar la ansiedad, el miedo y el pánico. Cada vez que un paciente se le dé su receta, es muy importante para que guarden la dosis según lo escrito.
En el caso de que un paciente no quiere que experimentan cambios rápidos, él o ella debe ser capaz de seguir usando el medicamento según lo prescrito debido a que los cambios o efectos no son inmediatos. Aunque los pacientes se sentirán un poco de calma en los primeros días, el gráfico no sube tan rápido como muchos esperarían. En primer lugar, la absorción de Xanax en el cuerpo es bastante lento. Esto es para asegurar que el fármaco dura mucho tiempo en el cuerpo antes de la siguiente dosis. Para algunos pacientes, se tarda un par de semanas para experimentar un cambio.
Por último, el uso de Xanax puede llevar a la adicción. Los pacientes menores de este medicamento tienen que tener mucho cuidado porque el fracaso para mantener la medicina con seguridad puede llevar a la adicción de otras personas, como los niños. El medicamento no está para ser compartido con nadie y sólo se deben tomar bajo estrictas instrucciones de un médico que está capacitado.