Atrincheramientos ideológicos
¿Puede la gente de Irlanda del Norte evitar más violencia étnica? Los conflictos étnicos crecen tan completamente fuera de control cuando estalla la violencia, ya que son los conflictos primarios. Son conflictos por la tierra y la supervivencia. Ellos son la lucha entre lo mismo y lo diferente. Son la batalla entre los rebeldes y las fuerzas de ocupación.
La historia demuestra que los rebeldes van a durar más tiempo sus invasores a menos que sean completamente eliminados. Generaciones de odio pueden pudrir con estallar en más violencia en el futuro.
El desarme del IRA es un paso positivo en la dirección correcta. El conflicto étnico no tiene que poner fin a la guerra, la muerte o desmembramiento. En lugar de ello, las soluciones a la miríada de problemas deben ser encontrados con compromisos permitidos para a ambos lados del pasillo.
Ya no se trata sólo la eliminación de la influencia protestante como los protestantes residentes en Irlanda del Norte han vivido allí durante generaciones. Ya no se trata de volver a la unificación con la República de Irlanda, ya casi 100 años de separación se ensancharon la brecha entre las dos regiones.
Se trata de la solución de los problemas que enfrenta el autogobierno y la convivencia pacífica (Shiraev y Levy, 2007).
Las preguntas que el pueblo de Irlanda del Norte deben responder incluir económica (desempleo amplia difusión-), la identidad cultural (que son el pueblo de Irlanda del Norte), la lengua (gaélico irlandés, inglés o ambos), la seguridad, la religión y la historia.
Conclusión
El futuro sigue siendo un territorio desconocido para Irlanda del Norte. Los altos el fuego y la reducción de medidas violentas es un buen paso adelante.
Una o dos generaciones sin violencia, con el continuo progreso en las discusiones y con una reparación realista de los problemas entre las dos principales facciones pueden facilitar la curación necesarios para la región para avanzar. Las diferencias que dividen a los pueblos no deben celebrarse como una barrera contra las experiencias culturales y regionales compartidos que podría unir a ellos.
ReferencesDarby, J. 1976. El conflicto en Irlanda del Norte. Dublín: Gill y MacMillan.McGarry, J., y O'Leary, B. 1990. El futuro de Irlanda del Norte. Oxford: Clarendon Press.
Shiraev,